Sacamos el error de la mezcla
Cuando la superficie de acero del extremo de una tubería está preparada y se completa la soldadura (Fig. 1) la tubería está lista para recubrirse. El mismo recubrimiento es un líquido anticorrosivo de dos componentes, que ofrece la protección más sólida para sus operaciones. Aunque tradicionalmente se ha mezclado este recubrimiento manualmente, una mezcla manual puede crear resultados decepcionantes. Como en cualquier proceso manual, es inevitable un error humano y preparar las proporciones incorrectas o una mezcla insuficiente puede afectar drásticamente a la funcionalidad de un recubrimiento. Por eso el sistema de dos cartuchos de Sulzer ofrece la perfecta solución (Fig. 2).
Una aplicación para un flujo preciso y constante
Otro desafío que presenta la aplicación manual es el uso de rodillos y cepillos para recubrir las tuberías. Esto deja la posibilidad de áreas expuestas y una protección incompleta, lo que solo puede conllevar un aumento del mantenimiento en el futuro. Algunos eligen eliminar esta posibilidad con el uso de un dispositivo de pulverización de alta presión con múltiples componentes. Sin embargo, un dispositivo así aporta más dificultades que superar. El exceso de pulverización provoca un desperdicio de material de recubrimiento, por no hablar del impacto dañino que ese líquido tiene en el entorno. La presión ejercida deja tras de sí una operación de limpieza de mucho trabajo.
El exceso de pulverización en los extremos de las tuberías provoca un desperdicio de material de recubrimiento, que puede introducirse en el medio ambiente. Nuestro sistema de cartucho doble utiliza la cantidad exacta.
Un proceso con el que pueden trabajar sus equipos
Debido a la exposición a materiales peligrosos durante la mezcla manual y la cadena de dispositivos de pulverización de alta presión, necesitamos un nuevo proceso más sencillo. En Sulzer hemos diseñado una solución que elimina ambos peligros. A diferencia de los dispositivos de alta presión pesados o una amplia gama de materiales, nuestro dispensador es fácil de usar y requiere poca formación. Se pueden volver a sellar los cartuchos para volver a usar el recubrimiento restante en aplicaciones futuras, minimizando el derroche. Sabemos que la soldadura in situ deja a los extremos de tuberías sin protección frente a la suciedad, el viento y la lluvia. Nuestra aplicación puede usarse sin importar las condiciones y cumple su función rápidamente.
Esta flexibilidad excepcional y un rendimiento confiable convierten a nuestro sistema basado en cartuchos en una solución nueva y emocionante para recubrir sus juntas de soldadura de campo.